Hoy quiero compartir una mascarilla que he estado usando desde hace un par de meses y que me encanta ya que se necesitan solo 3 ingredientes y uno de ellos es agua, así que pienso es fácil de hacer y se obtienen muy buenos resultados.
Esta mascarilla básicamente se realiza con harina de arroz y bicarbonato de sodio, así de sencillo. El polvo de arroz es utilizado en la cosmética para absorber el exceso de grasa en la piel y reducir los poros (lo podemos encontrar en polvos sueltos y compactos) y es comúnmente utilizado en Asia para todo tipo de productos de cuidado de la piel por ser rico en antioxidantes ayudando a mantener la piel luciendo joven y radiante, por ser un exfoliante natural y por tener propiedades hidratantes. El Bicarbonato de Sodio ayuda a potenciar el efecto exfoliante del arroz ya que sirve para limpiar profundamente los poros y da un efecto peeling a la piel.
Ahora bien, veamos la receta...